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Profesional de la visión en equipos médicos

¿Qué es el hidrogel de silicona?

5 mins lectura

Quienquiera que inventara el hidrogel de silicona se merece un monumento al mejor amigo de nuestros ojos.

 

Para entender por qué, permítenos darte una pequeña lección de historia.

Los orígenes de las lentillas

 

La primera persona que soñó con unas lentillas fue Leonardo da Vinci, en el siglo XVI (al parecer, Da Vinci pensó en todo). Sin embargo, hubo que aguardar hasta la década de 1880, cuando se concibieron las lentillas de vidrio, para que la idea se convirtiera en una realidad. A finales de la década de 1940 se habían fabricado ya las primeras lentillas de plástico. Pero había un problema: las lentillas no eran porosas al oxígeno, y esta forma vital de alimento no podía pasar. A resultas de ello, aquellas lentillas rígidas no podían llevarse durante demasiado tiempo.

 

El verdadero antepasado de las lentillas actuales se inventó a finales de la década de 1950, cuando empezó a usarse un material blando de hidrogel hidrófilo («con afinidad al agua») para fabricar lentillas. Las primeras lentillas de este tipo se lanzaron al mercado a principios de la década de 1970. No tardaron en seguirlas las lentillas rígidas permeables al gas, que combinaban las estructuras rígidas más pequeñas de finales de los años cuarenta con la transmisibilidad a oxgíeno.

Las lentillas causaron entusiasmo por la libertad que ofrecían, pero mucha gente se olvidaba de limpiarlas, desinfectarlas y guardarlas de manera adecuada, y había quien ni siquiera se acordaba de quitárselas por la noche. El uso excesivo y otras prácticas poco saludables conllevaban la aparición de ojos enrojecidos, cansados o (lo que es peor) de lesiones.

 

En la actualidad, la ciencia ha llevado el uso de lentillas a nuevas cotas de comodidad y seguridad. A resultas de ello, el auge imparable de las lentillas modernas en décadas recientes ha revolucionado las vidas de las personas.

Gráficos del ojo

Hidrogeles

 

La clave ha sido la concepción de las lentillas de hidrogel hidrófilo a partir de la década de 1970. Estas combinan plástico moldeado y agua para crear una lentilla de hidrogel precisa altamente compatible con el ojo humano. Incluso en el caso de las personas con ojos sensibles o resecos, hay un amplio abanico de lentillas blandas, que pueden ser cómodas y seguras.

 

No obstante, no hay nada perfecto en la vida. El contenido acuoso de una lentilla de hidrogel puede reducirse si no se parpadea lo suficiente o en ambientes secos y ventosos. Y la superficie de la lentilla puede resecarse tras todo un día de uso. En tales casos, las lentillas de hidrogel pueden resultar más incómodas de llevar. Pero, por suerte, existe una lentilla blanda más nueva que se acerca mucho a la perfección. ¿Te interesa? Pues sigue leyendo…

Hidrogeles de silicona

 

Las alternativas más avanzadas del siglo XXI (inventadas en 1998) son las lentillas hechas de hidrogel de silicona. Funcionan exactamente como sus primas de hidrogel, pero suman los beneficios de la silicona, que aumenta la permeabilidad al oxígeno. Esto permite que pase más aire (y, por consiguiente, más oxígeno) a través de la lentilla.

 

De hecho, estos inventos tan inteligentes permiten que llegue a la córnea cinco veces más oxígeno que con una lentilla blanda de hidrogel estándar, gracias a lo cual tus ojos se mantienen sanos y cómodos incluso aunque lleves las lentillas puestas durante todo el día. Y puesto que las lentillas de hidrogel de silicona retienen el agua, se mantienen especialmente blandas y flexibles durante todo el tiempo.§

Gráfico que muestra el flujo de o2 a través de una lente de contacto

¿Por qué necesita oxigenarse el ojo?

 

La oxigenación es importante. Si el flujo de aire y la película lagrimal alrededor de los ojos se limita, pueden aparecer signos y síntomas de hipoxia, provocada por un suministro insuficiente de oxígeno. En sí, la córnea carece de vasos sanguíneos (que probablemente impedirían la transparencia óptica), de manera que su suministro de oxígeno más importante procede directamente del ambiente y le llega a través de la película lagrimal que cubre el ojo.

 

Una reducción del suministro de oxígeno y la hipoxia consiguiente pueden provocar una visión borrosa, causada por una inflamación de la córnea, o algo peor si la ausencia o limitación de oxígeno se prolonga durante un tiempo prolongado. También puede provocar enrojecimiento de los ojos, porque los vasos sanguíneos dilatados intentan suministrar oxígeno a la córnea. Los vasos sanguíneos pueden empezar a extenderse hacia las pupilas, en un intento por abastecer de oxígeno las zonas privadas de este, y una vez ocurre esto no hay nada que hacer. Es irreversible. Tus ojos se infectarán más fácilmente o, lo que es peor, quedarán con lesiones permanentes.

 

Llevar una lentilla de hidrogel de silicona es una opción fantástica para usar lentillas sin arriesgarse a que ocurran estos problemas. Puedes llevarlas durante más horas que unas lentillas de hidrogel y, al mismo tiempo, preservar la salud de tus ojos. Y esto las hace especialmente populares entre las personas con un estilo de vida activo, con ojos resecos o que se pasan el día delante de una pantalla.

Una lentilla de hidrogel de silicona para cada persona, necesidad u ocasión

 

Se utilizan materiales de hidrogel de silicona para fabricar todo tipo de lentillas, desde lentillas desechables diarias superblandas hasta lentillas mensuales más robustas. La silicona, que aporta mayor flexibilidad, también se utiliza en las lentillas permeables al gas modernas. Y ha permitido crear las lentillas de uso prolongado, que se llevan durante semanas o incluso todo un mes de manera ininterrumpida.

Las desventajas

 

¿Hay algún problema relacionado con este material inteligente?

 

Bueno, las lentillas de hidrogel de silicona son un poco más caras que sus equivalentes de hidrogel. Y también tienden a acumular más depósitos lípidos (grasas) que otras lentillas de contacto, lo que hace más difícil mantener limpias las de uso mensual.

Mujer frente al ordenador frotándose los ojos

 

Si tienes tendencia a tener los ojos resecos, la tecnología de hidrogel de silicona supera a la de las lentillas de hidrogel. Sin embargo, como sucede con cualquier barrera física, sigue habiendo un límite de tiempo durante el cual puedes llevar las lentillas cómodamente. Aun así, antes de volver a usar gafas, podrías encontrar una solución a este problema que mantendrá tus ojos bien hidratados, cómodos y seguros. Esto podría ser usar lentillas mensuales de hidrogel de silicona con una solución de limpieza para lentillas con una fórmula específica.

¿Hidrogel o hidrogel de silicona?

 

Decantarse por unas lentillas de hidrogel o de hidrogel de silicona depende, como tantas otras cosas en el caso de los usuarios de lentillas, de las necesidades y los deseos personales como de la ciencia. Lo que le funciona mejor a una persona puede no funcionarle a otra. Por suerte, puede haber respuestas para todas las necesidades.

 

Algunas lentillas llevan tecnología ocular fabricada con hidrogel de silicona tanto para personas con miopía e hipermetropía como para personas con astigmatismo y presbicia que requieren una lentillas multifocales. Y también es una opción excelente para quienes desean cambiar de color de ojos (tanto si tienen algún defecto de visión como si no).

Un futuro mejorado con libertad de visión.

 

El hidrogel de silicona ha llevado las lentillas a una nueva era de comodidad y seguridad

 

Prácticamente para todas las necesidades cosméticas o de corrección de la visión, optar por unas lentillas de hidrogel de silicona puede ser una buena opción.

 

¡Es, sin lugar a dudas, un material que te cambiará la vida!

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