Salud de la visión
¿Puedo ducharme con las lentillas puestas?
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Aunque pueda parecerlo, las lentillas y el agua no son una buena combinación. Debido a que las lentillas están compuestas en gran parte por agua y tienden a absorberla, podría parecer lógico pensar que son compatibles. Sin embargo, la realidad es que no lo son.
El agua puede deteriorar una lentilla tanto como una uña rota o una mota de suciedad. En este artículo vamos a ampliar la información sobre la peliaguda relación entre las lentillas y el agua, centrándonos en el uso de lentes de contacto en la ducha.
Bendita ignorancia
Además de dormir y nadar llevar lentillas en la ducha es uno de los errores más frecuentes que cometen quienes las usan. Es muy tentador dejárselas puestas y, además, la mayoría de la gente desconoce que es una idea nefasta. Pero ¿por qué?
Lo principal es saber que el chorro de agua que cae sobre uno desde la alcachofa de la ducha procede del suministro de la red, que está conectado con agua que viaja por toda la red nacional de cañerías y estaciones de bombeo. Es un agua perfectamente limpia y potable, pero no es tan perfecta para que caiga sobre tus ojos, sobre todo si utilizas lentillas. El agua contiene una serie de sustancias químicas detergentes, como cloro, que no están concebidas para entrarte en los ojos o entrar en contacto con las lentillas, además de bacterias y microbios en busca de un lugar agradable y calentito en el que multiplicarse.
Pequeños riesgos, grandes consecuencias
Aunque las posibilidades de contraer una infección por el hecho de ducharse con lentillas son menores que las de llevarlas puestas en una piscina, es recomendable evitar ambos riesgos.
Tus lentillas son como esponjas: les encanta el agua. El problema es que a las bacterias también les encanta el agua. Cualquiera que haya sufrido conjuntivitis entenderá por qué esto es un problema. Las infecciones oculares, como la conjuntivitis, son dolorosas y molestas.
Y en efecto, las posibilidades de que esto ocurra son bajas, pero tal como te pones el cinturón de seguridad en el coche para protegerte en el improbable caso de tener un accidente de tráfico, lo más sensato es no bañarse ni ducharse con las lentillas puestas, lo cual te protegerá en el también improbable evento de sufrir un ataque de bichos.
El otro problema es que el agua de la ducha puede hacer que las lentes de contacto blandas se deformen, se hinchen o se te queden adheridas al ojo. Y, en el mejor de los casos, todo ello es incómodo. En el peor, pueden arañarte la córnea y los arañazos actúan como una puerta que da la bienvenida a los gérmenes causantes de infecciones.
Dúchate primero y luego ponte las lentillas
La manera más fácil de evitar el riesgo de sufrir alguna de estas situaciones desagradables es ducharse antes de ponerse las lentillas. En la ducha, es fácil entender qué es cada cosa aunque las veas difuminadas; así proteges tu visión y tu salud ocular. Si te secas con una tolla normal, conviene tener una toalla de mano o de microfibra más pequeña que no suelte pelusa para secarte los dedos y la cara. De este modo te asegurarás de que ningún pelillo fibroso o mota de suciedad se interponga entre tus ojos y las impolutas puntas de tus dedos en el momento de ponerte las lentillas.
Otra opción es quitarse las lentillas por la noche antes de ducharse, si forma parte de tu rutina nocturna. Es una opción especialmente sensata para quienes se ponen las gafas tras llevar las lentillas durante todo el día, justo antes de meterse en la cama a leer o para dejar descansar los ojos. Lo importante es que si te duchas antes o después de ponerte las lentillas no tendrás que preocuparte por ninguna de estas consecuencias desagradables.
¿Y qué pasa si me dejo puestas las lentillas en la ducha por error?
Si te das cuenta de que has entrado bajo el agua con las lentillas puestas, cierra los ojos y sal de la ducha. Quítate las lentillas y o bien báñalas con solución nueva (si llevas lentillas mensuales) o bien prepara unas lentillas diarias nuevas para cuando acabes de ducharte.
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Para lentillas: Consulta a tu profesional de la visión sobre el uso, el mantenimiento, las precauciones, las advertencias, las contraindicaciones y los posibles efectos adversos.
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Las lentes Alcon cumplen con la normativa de productos sanitarios. Consulte contraindicaciones y posibles efectos secundarios en total.myalcon.com/es/. AOSEPT® HydraGlyde® cumple con la normativa de productos sanitarios. Contraindicado en personas alérgicas a cualquiera de sus componentes. Posibles efectos adversos: molestias oculares persistentes, ardor, escozor, sensación de ojo seco, lagrimeo excesivo, enrojecimiento (irritación, respuesta alérgica) o cambios en la visión (disminución de la visión). Consulte a su profesional de la visión para obtener la lista completa de indicaciones, contraindicaciones y precauciones. Alcon y los logos de Alcon son marcas comerciales de Alcon.
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